Las Margaritas Chiapas. 16 de abril. “En pocas palabras hermanos: los
ejidatarios de la Cioac-h de Miguel Hidalgo, nos lo llevaron todo, lo
han robado todo y lo que no les sirve, lo han quemado”, denuncian
familias indígenas tojolabales, desplazadas de la comunidad Primero de
Agosto, el pasado 23 de febrero por parte de la Central Independiente de
Obreros Agrícolas y Campesinos Histórica (Cioac-H). “Nos están
enterrando en vida, nos quieren matar solo porque nosotros queremos
mantener a nuestras familias produciendo la tierra”, externan desde su
campamento, en el marco del 96 aniversario luctuoso del General Emiliano
Zapata.
En conferencia de prensa, los habitantes del municipio de las
Margaritas exponen los antecedentes de su problemática y recuerdan que
el ocho de diciembre de 2011, en una reunión con ejidatarios de Miguel
Hidalgo y las 17 familias ahora de Primero de Agosto, “dimos a conocer
nuestras razones ante la asamblea, peticionando que necesitamos trabajar
las tierras que estaban baldíos (predio el Roble), para mantener a
nuestras familias. Después de diversas reuniones, los ejidatarios de
Miguel Hidalgo cerraron el diálogo, diciéndonos que a partir de entonces
ya no pertenecíamos a dicha comunidad”.
“Desde entonces se suscitaron una serie de eventos violentos hacia
nuestras personas y ya no podíamos vivir en paz, por lo que el día
primero de agosto de 2013, entramos al predio el Roble, para trabajarlo y
vivir las 17 familias en el área baldía, y construir nuestra vida
colectiva. De acuerdo al plano ejidal, las hectáreas del ahora poblado
Primero de Agosto, no pertenecen al ejido Miguel Hidalgo”, abundan los
originarios de la zona selva fronteriza.
Nueve meses después, comparten l@s indígenas tojolabales, “en la
mañana del ocho de mayo de 2014, militantes de la Cioac-h de Miguel
Hidalgo, encabezados por el comisariado ejidal Reinaldo López Pérez,
entraron al poblado Primero de Agosto con palos, machetes y sembraron
maíz en nuestros solares, diciéndonos que no tenemos valor para
enfrentarlos”. Las provocaciones iniciaban.
Al otro día, el viernes nueve de mayo por la tarde, “regresaron los
de la cioac-h, nos agredieron e hirieron en el cuello con un machetazo,
al compañero Arturo Pérez López, de 24 años de edad. Hasta la fecha
sigue impune dicho acontecimiento, Arturo ha perdido la movilidad de su
brazo izquierdo y no ha recibido la atención médica necesaria”, comentan
los indígenas agredidos.
Siete meses después, el 17 de diciembre, comentan que 50 hombres y
mujeres integrantes de la cioac-h, provenientes del ejido Miguel
Hidalgo, entraron al poblado Primero de agosto, portando palos, machetes
y algunos con armas de grueso calibre. “Nosotros recibimos órdenes de
nuestra organización, sino sacan sus cosas y si hablan, tenemos órdenes
de matarlos. Nosotros somos hombres y estamos con el gobierno”, indicó
el comisariado Reinaldo López Pérez, a las familias de Primero de
Agosto.
“En un solar empezaron a destruir dos gallineros. Dejaron todo
destruido, incluyendo láminas, matas de café y árboles frutales. Se
burlaban de nosotros diciéndonos que no tenemos el valor de enfrentarlos
y defenderlos”, nuevamente provocaban a la comunidad Primero de Agosto,
para iniciar una confrontación entre indígenas, característica con la
que opera la Cioac-h en la zona. Ejemplo de ello es el ataque de
integrantes de la cioac-h, a la comunidad zapatista de la Realidad, el
dos de mayo de 2014, donde fue asesinado el maestro zapatista Galeano y
destruídas la escuela y clínica autónomas del poblado.
“El 28 de diciembre, nos reunimos con las dependencias de gobierno y
con autoridades del ejido Miguel Hidalgo, que se comprometieron a
evitar agresiones físicas y verbales y a no portar armas de fuego”,
añaden las familias de Primero de Agosto. “los de Miguel Hidalgo
violaron los acuerdos firmados”, denunciaron posteriormente, en otra
reunión con dependencias de gobierno, el ocho de enero de 2015.
Poco después, el 23 de febrero de 2015, las 17 familias indígenas
tojolabales, de la comunidad Primero de agosto, son desplazadas
violentamente, las cuales están integradas por 12 menores de edad, un
recién nacido, 20 mujeres y 25 hombres. Sus matas de café sembradas y
en viveros, gallinas, ropa, casa, utensilios y herramientas le son
robados y destruidos.
Las y los indígenas desplazados de Primero de agosto, exigen a los
tres niveles de gobierno el cumplimiento inmediato de las minutas de
acuerdo, “en especial la que fue firmada el 25 de febrero de 2015 (con
el subsecretario Gustavo Moscoso Centeno), donde se comprometieron a
repartir las tierras en partes iguales; se garantiza el pronto retorno a
nuestro poblado; la aplicación inmediata de la justicia a los
responsables materiales e intelectuales de los hechos delictivos; la
reparación integral de los daños ocasionados y la atención médica
necesaria a nuestro compañero Arturo Pérez López”.
Fuente: PozolColectivo